martes, 11 de septiembre de 2018

No lo entiendo.

Como es posible que después de todo el daño que me causaste, yo siga queriéndote como lo hago. Han pasado meses desde la ultima vez que hablamos, y aquí sigo, esperando a que me pidas perdón, y yo cual tonta perdonarte. Porque te perdonaría, olvidaría todo lo que paso entre nosotros.

 Te veo caminando por los pasillos, con tu aire chulesco y siempre con una sonrisa, me acuerdo cuando esas sonrisas me las regalabas a mi. Aun así noto que tus ojos no sonríen, y me encantaría acercarme y preguntarte que te pasa, y te escucharía tan atentamente como nadie jamas lo ha hecho, pero supongo que ya no podrá ser, lo nuestro ya es imposible. Me odias, y tengo miedo de preguntar por qué.

No entiendo como puedo seguir pensando en ti. Me hiciste sufrir, mucho. No te podía soportar, pero no te odiaba a ti, odiaba el hecho de no poder estar contigo como solíamos estar. La gente me decía que no eras bueno para mi, y sabes lo peor, que les creí, les creí a tal punto que te hice daño, y lo siento. Pero jamas escucharas mi perdón, porque dejaste claro que no querías saber nada de mi, y yo respeto tu decisión, pero si algún día lees esto, quiero que sepas que te quiero, y que siempre tendrás un hueco en mi corazón.

Siento ser la razón por la cual te de miedo enamorarte. Siento haberte roto el corazón. Pero tú también rompiste el mío, poco a poco, y lo dejaba pasar. Aun así, dejaría que me lo rompieras mil veces mas, con tal de que me regales una sonrisa tuya.

No entiendo mi cabeza, aveces pienso que fui yo la culpable y otras veces pienso que fuiste tu, lo puedes comprobar en este texto. Mi cabeza es un lío.

Lo único que entiendo es que te quiero y te quiero de vuelta en mis brazos.

No hay comentarios:

Publicar un comentario